Pio, pio

jueves, 5 de septiembre de 2013

Stop-Motion. Primera Parte.

Pues resulta que viendo unos gifs en Tumblr del señor Jan Švankmajer, un artista gráfico más que surrealista y director de varios cortometrajes de animación -imagínense cómo es su estilo si ha servido como inspiración para Tim Burton o Terry Gilliam-, me picó el gusanillo del stop-motion. En concreto la publicación es esta.
Nunca he hecho stop-motion más allá del típico pausar la grabación y sustituir un objeto para, p. ej. aparecer desnudo por arte de mágia. De joven desconocía que estaba aplicando la antiquísima "técnica -o truco- de sustitución" de Georges Méliès.


Pero el stop-motion consiste en aparentar el movimiento de objetos con el uso de imágenes fijas; el movimiento se consigue fotograma a fotograma manipulando el objeto. Tengo que decir que siempre he pensado que es un trabajo fácil, francamente, lo es, pero también es muy laborioso. Básicamente es ensayo y error, paciencia y tiempo.

He empezado con dibujos, resulta más fácil y rápido, además de que me ahorro el "escenario", cosa muy importante en los trabajos de stop-motion, pues al estar a escala, los escenarios son los que dan realismo a la escena.




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